La inflación, el aumento de los costos de endeudamiento y una recuperación económica pospandemia que parece estar perdiendo fuerza están generando algunas preocupaciones entre los inversores. En esta situación incierta, las empresas de procesamiento de pagos como Visa y American Express están navegando en aguas inciertas. El reciente informe de Visa reveló el menor aumento de ganancias trimestrales en más de dos años, lo que sugiere que el gasto de los consumidores puede estar desacelerando.[1] Sin embargo, analistas experimentados y expertos financieros todavía ven potencial en estos gigantes de pagos y creen que siguen siendo una buena opción de inversión. Profundicemos en las razones por las que los inversores no deberían descartar rápidamente a estas empresas.
1. Disminución temporal de beneficios
El último informe de Visa sí muestra un menor crecimiento de los beneficios, pero en el contexto de un aumento excepcional del gasto tras la pandemia. Se esperaba que el ritmo de crecimiento se desacelerara a medida que la inflación se moderara y se estableciera en niveles más sostenibles. Es esencial ver esta reducción en el crecimiento de las ganancias como un cambio natural y temporal, en lugar de una disminución a largo plazo en el desempeño de la empresa.
2. Fuerte demanda de los consumidores
Un factor que respalda la inversión en Visa y American Express es la continua y fuerte demanda de los consumidores, particularmente en el sector de viajes. A pesar de las preocupaciones sobre una posible desaceleración del gasto de los consumidores en viajes, el gasto sigue siendo fuerte. Esta resiliencia sugiere que las empresas están bien posicionadas para aprovechar la recuperación a medida que los viajes globales cobran impulso gradualmente.
3. Gestión financiera estratégica
El director financiero de Visa, Vasant Prabhu, asegura a los inversores que la empresa está bien preparada para afrontar los desafíos del entorno económico actual. American Express también mantuvo su pronóstico de ganancias para todo el año, lo que indica una gran fe en su resiliencia financiera. La gestión financiera prudente de estas empresas da confianza a los inversores potenciales en su capacidad para adaptarse a las fluctuaciones del mercado y sostener el crecimiento. [2]
4. Perspectivas de la industria
La industria de procesamiento de pagos en general sigue siendo un aspecto fundamental de la economía global, ya que facilita las transacciones y permite que las empresas prosperen. A medida que el mundo se vuelve cada vez más sin efectivo y los pagos digitales continúan arraigándose, empresas como Visa y American Express están preparadas para beneficiarse de esta transformación. Además, el auge del comercio electrónico y la economía digital ha ampliado su potencial de mercado, abriendo nuevas oportunidades de crecimiento.
Si bien el reciente informe de Visa puede haber generado algunas preocupaciones, es importante que los inversores consideren el contexto más amplio. Las fluctuaciones económicas son una parte natural de cualquier mercado y empresas establecidas como Visa y American Express han demostrado su capacidad de recuperación una y otra vez. Su capacidad para mantener un crecimiento estable incluso durante períodos difíciles los convierte en una opción de inversión atractiva. Como ocurre con cualquier inversión, se requiere diligencia debida y un análisis exhaustivo, pero dados los sólidos fundamentos y perspectivas de la industria, invertir en Visa y American Express parece ser una opción inteligente para quienes buscan estabilidad y crecimiento potencial en sus carteras.
[1,2] Las declaraciones prospectivas se basan en suposiciones y expectativas actuales, que pueden ser inexactas, o en el entorno económico actual, que puede cambiar. Dichas declaraciones no son garantía de desempeño futuro. Implican riesgos y otras incertidumbres que son difíciles de predecir. Los resultados pueden diferir materialmente de aquellos expresados o implícitos en cualquier declaración prospectiva.